Como diría sabina:
Vivo en él numero 53 calle de la amargura, ya estoy allí, odio decirlo, pero mi mente sale a buscarte, a besar tus recuerdos, abrazo tu recuerdo en mi cama vacía, recuerdo los momentos de que fueron más felices, en ella, la cama que nos amo, mientras nos amábamos, entré cálidos besos y pasionales abrazos.
Recuerdo los momentos de que tu ojos se cerraban y tu boca se habría buscando mi boca, recuerdo mis manos en tu cuerpo, persiguiendo el placer por todo el, recuerdo el olor de momento, el olor del sexo, el placer de verte gritar mi nombre, mi amor.
Noche de amor, placer y sexo nos siguieron, siempre pensé que así serial hasta que descubrí, que el amor voló entre las sabanas a la lavadora y desapareció, quedando solo el placer y el sexo como tal, las noches era iguales y desde la ventana el amor volaba lejos, ya no era amor, era follar con pasión, como amantes, como amigos deseosos del cuerpo ajeno.
En que momento ocurrió todo, en que momento lavaste lo que todo lo hacia especial... como diría sabina, vivo en el numero 53 calle de la amargura, pero antes hubo amor y se lo llevo la lavadora, que ingenua sensación de vació, pero alguien tenia que tener la culpa y fue del borreguito.
Pero aun así busco en las sabanas de mi recuerdo, tu sudor en mi piel, tu sabor en mi boca y tu sexo en mi cuerpo, sin abandonar jamás la sensación que fue lo mejor de la mí mitad de mi vida.
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